La habilidad de saber elogiar se está convirtiendo en una propuesta innovadora para ser aprendida e implementada por los profesionales y empresas.
A quien no le gusta ser elogiado, pero la pregunta es: ¿Cada cuanto tiempo elogiamos a otros?
Como Coach en liderazgo he venido comprendiendo la enorme necesidad de que se genere una cultura del elogio en los grupos, en los negocios y empresas en general, esto sin duda traería consigo un mar de oportunidades, esto sin dejar a un lado nuestra familia que como digo siempre: es nuestro primer equipo.
El fondo de esto es si elogiamos de forma auténtica o con interés.
Lo realmente importante es que incorporemos esta habilidad en nuestra vida para sentirnos más humanos, más felices y ayudar a otros a que se sientan igual, que es el verdadero propósito.
Hoy quiero compartirte un par de puntos que aplico sobre el “arte de elogiar” que he aprendido de Dale Carnegie (Empresario y escritor estadounidense, experto en relaciones humanas y comunicación eficaz) y que profundizo en mi programa de liderazgo para profesionales y emprendedores: Conectando Líderes que Inspiran, puntos que estoy segura te ayudarán a elevar la conexión sincera con otros a la hora de comunicar los elogios:
1. Sé inmediato: el mejor momento para elogiar a alguien es cuando ocurre el evento digno de elogio: algunas veces dejamos pasar por alto estas situaciones como algo normal, pero ojo, no se trata de volverse una máquina que siempre esté en ello, de hecho, la recomendación es elogiar cuando una persona haya alcanzado un estándar esperado. Ejemplo: cuando alguien entrega algo antes de una fecha límite y con los parámetros requeridos.
Lo que se debe evitar es dar un reconocimiento especial por un desempeño rutinario. El propósito de elogiar es buscar elevar el nivel de quien lo recibe y motivar a los demás.
2. Sé específico: incorpora el motivo del elogio en el elogio mismo. Sin más ni menos, no se trata de alargar, ni decorar, se trata de ser claros y no compararle con otros.
3. Sé propositivo: describe su aporte para el proyecto, el grupo o la organización: en este punto incluso si eres o no eres el líder del equipo puedes enviar un correo a quienes participaron manifestando los resultados positivos obtenidos y sumarle un par de aprendizajes obtenidos. Ejemplo: en el caso de una presentación de un proyecto.
Ten en cuenta que elogiar no debe convertirse en una rutina aburrida, más bien en un acto tan humano que nos ayude a crecer como personas e inspirar el desempeño de quienes lo reciben y de quienes lo ven.
El liderazgo es una competencia que se aprende, aunque muchas personas tienen esto inmerso en ellos, la gran mayoría de profesionales y emprendedores con visión de crecimiento se dan la oportunidad de aprenderlo y aplicarlo, viendo como resultado una vida personal y profesional enfocada, auténtica, más creativa, con mayor visión y oportunidades.
Aquí te invito a explorar un poco de mi programa y algunos testimonios de líderes que he tenido la oportunidad de apoyar Programa en liderazgo personal y profesional – Clubcli.
En este viaje, descubrirás estrategias efectivas, desarrollarás habilidades de toma de decisiones y fortalecerás tu capacidad para inspirar a otros.
Si estás listo para desbloquear tu verdadero potencial como líder, te animo a que te sumerjas en este programa transformador para profesionales y emprendedores con negocios en desarrollo.
Contáctame por correo electrónico a monicaaraque@clubcli.com para obtener más información y dar el primer paso hacia una versión más fuerte y efectiva de ti mismo como líder.
El liderazgo comienza con una decisión.
¡Estoy emocionado de acompañarte en este viaje hacia el éxito!
Nos vemos pronto.